MÉXICO, DF.- Uno de los goles más bellos de libre directo que se recuerdan es el del brasileño Roberto Carlos ante la selección de Francia en un partido amistoso de cara al Mundial de Francia 1998.

El 3 de junio de 1997, Roberto Carlos colocó el balón a 35 metros de la portería de Fabien Barthez. Retrocedió 18 pasos, y luego sacó un zurdazo brutal para vencer al arquero que un año después se coronaría campeón del Mundo.

A casi 18 años de haberlo marcado, una empresa decidió recrear a travésde una computadora la majestuosa anotación considerada por algunos como casi imposible de volver a realizar.