FILADELFIA, Pensilvania.- Andrés Guardado volvió a hacer de las suyas en la final de la Copa Oro al conseguir un golazo que encaminó a la selección mexicana a un triunfo sobre Jamaica por 3-1 para así conquistar por séptima vez el título del torneo de la Concacaf.

 

 

"El Principito", que había anotado de penal el gol del triunfo ante Costa Rica en los cuartos de final y otros dos más desde los 11 pasos en la victoria sobre Panamá en las semifinales, abrió el marcador contra Jamaica de forma genial al minuto 31.

 

 

El mediocampista y capitán de la selección mexicana midió de forma perfecta un centro desde la derecha de Paul Aguilar y, con el balón en pleno vuelo, lo clavó en el ángulo superior izquierdo.

 

Fue un verdadero golazo, pero más importante aún, la anotación sirvió para quitarle una presión enorme al Tri y a su técnico Manuel "El Piojo" Herrera después de dos victorias gracias a polémicos penales. 

 

Guardado no estaba jugando al 100 por ciento debido a un golpe en el empeine que recibió ante Panamá, y hasta estuvo en un momento dado en duda para la final, pero una vez más demostró su cría en la cancha cuando más México lo necesitaba.