MÚNICH, Alemania.- El presidente de honor del Bayern Múnich, el legendario Uli Hoeness, se quedó bien a gusto cuando le preguntaron sobre dos de los nuevos mejores equipos del mundo, el PSG y el Manchester City, dos entidades que han alcanzado el éxito gracias a los petrodólares. 

"Su dinero de mierda no importa, eso no es suficiente. ¿Al Khelaifi el nuevo Hoeness? No, no lo creo, no sé si le gusta el fútbol. ¿La diferencia entre él y yo? Trabajé duro para ganar mi dinero y él lo recibió como un regalo. Lo ponen a su disposición y no necesita trabajar para eso. Cuando quiera un jugador, encontrará a su emir". 

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Así de contundente opina el directivo del conjunto bávaro, histórico donde los haya en el Viejo Continente y con 6 Copas de Europa en sus vitrinas. 

“Hasta ahora estos dos clubes no han ganado nada, nada en absoluto. Volverán a perder contra nosotros. Ese debe ser nuestro objetivo. Y cuando les ganamos, eso me hace muy feliz, eso es lo que me estimula".

Son muchos los que opinan como Hoeness. El debate sobre el fútbol de siempre y el actual, en el que tienen cabida los capitales procedentes del petróleo. 

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