CONCEPCIÓN, Chile.- Es muy cierto que el valor monetario de una selección no equivale a que se juegue a un buen fútbol, ni que tampoco te garantice la victoria por ser más valioso que tu contrario, pero hay ocasiones en que las diferencias son tan grandes que no escapan a la vista de cualquiera, este es el caso del partido que disputarán hoy Argentina y Paraguay, por las semifinales de la Copa América.

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— Copa América 2015 (@CA2015) junio 30, 2015

Según datos de www.transfermarkt.co.uk la selección albiceleste esta tasada en unos 564 millones de dólares (MDD), mientras que la humilde selección albiroja, sólo vale unos 46.1 MDD. La diferencia que asciende a 518 MDD es realmente exhorbitante, esta cifra sería suficiente para comprar al Arsenal, Atlético de Madrid, Borussia Dortmund o incluso al Paris Saint Germain, lo cual resulta completamente ridículo.

#Chile2015 Martino y Ramón Díaz se cruzaron en el estadio de Concepción. Hoy se enfrentan: https://t.co/CsyXQ92CDx pic.twitter.com/cRFGY4ePS6

— Selección Argentina (@Argentina) junio 30, 2015

Con tan sólo el cuarto jugador más valioso de la plantilla argentina, que resulta ser Gonzalo Higuaín, podría comprarse toda la selección Guaraní. El “Pipa” tiene un valor en el mercado de 46 MDD. casi el mismo valor exacto de los 23 jugadores paraguayos que hoy le harán frente a la poderosa Argentina. Mientras tanto, el jugador más valioso del “Pelado” Díaz, Derlis González cuesta unos 5.2 MDD, cifra inferior a la del portero titular de Argentina, Sergio Romero, quien esta tasado en 5.5 MDD, siendo el jugador titular de menor costo en la selección “Che”.

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— Selección Paraguaya (@Albirroja) junio 30, 2015

Hoy por la tarde en la cancha todos estos números perderán por completo su valor, cuando el colegiado de el pitazo inicial, los signos de dólares desaparecen y sólo quedan 22 hombres en el campo de juego peleando por un balón. Sin importar el resultado, esperemos que sea un gran partido de fútbol y que las diferencias se queden sólo en el papel, como fue el enfrentamiento de fase regular.